1984
1984 es una novela política de ficción escrita por George Orwell entre 1947
y 1948 y publicada el 8 de junio de 1949. Se la considera como una de las obras
cumbre de las novelas distópicas (antiutopía, sociedad ficticia indeseable) junto
a Un
mundo feliz, de Aldous Huxley, y Fahrenheit 451 de Ray Bradbury.
La novela es una descripción crítica
de los regímenes totalitarios, muy en particular del régimen estalinista. El
título que se le da al gobernante es “Gran Hermano”, y la descripción que
Orwell hace de él no deja lugar a dudas: es Stalin.
La novela se desarrolla en una Inglaterra
futurista de postguerra y cuya sociedad se encuentra dividida en tres grupos.
Los miembros “externos” del INSOC (Newspeak
for English Socialism) el Partido
Único; los miembros del Partido Interno, o élite dirigente del partido; y una
masa de gente marginal que vive atemorizada y aislada de la política, los proles.
Los miembros “externos” del Partido
constituyen la burocracia del aparato estatal, por lo que viven sometidos a un
control estricto y a una propaganda alienante que los desmoraliza y les impide
pensar de forma crítica. El estado ha suprimido cualquier derecho y los condena
a una existencia miserable, con riesgo de perder la vida si no demuestran lealtad
y sumisión al Gran Hermano. Para ello se organizan numerosas manifestaciones
donde se requiere la participación activa de los miembros, gritando las
consignas favorables al partido, clamando contra los supuestos traidores y
dando rienda suelta al más desaforado fanatismo en los Diez Minutos de Odio.
Resulta muy interesante
mencionar el aparato de la “Policía del Pensamiento”. Una policía encargada de
perseguir los “crimentales”, el mero hecho de pensar en contra de los ideales
del Partido. Además, se fomenta entre los Jóvenes Espías (niños) un espíritu de
vigilancia continua de sus progenitores, a los que deben denunciar si aprecian
desviación en la doctrina del INGSOC.
El protagonista de la novela es
Winston Smith, cuyo cometido es reescribir la historia según las órdenes que
dicta el Ministerio de la Verdad. Los ministerios que rigen el nuevo Estado son
los siguientes:
·
El Ministerio
del Amor, que se ocupa de administrar los castigos y la tortura.
·
El Ministerio
de la Paz, encargado de asuntos relacionados con la guerra y cuyo es
perpetuar la contienda. Si hay guerra con otros países, el país está en paz
consigo mismo. Como señala la psicología social, hay menos revueltas sociales
cuando el odio y el miedo se pueden enfocar hacia un enemigo externo.
·
El Ministerio
de la Abundancia, encargado de la Economía y de conseguir que la gente
viva siempre al borde de la subsistencia mediante un duro racionamiento y
escasez continua.
·
El Ministerio
de la Verdad, se dedica a manipular y destruir los documentos históricos de
todo tipo (fotografías, libros y periódicos), para conseguir que las evidencias
del pasado coincidan con la versión oficial de la historia mantenida por el
Estado y con las previsiones del Gran Hermano.
Winston Smith vive en el Londres de un virtual 1984,
en un mundo dividido en tres bloques de potencias:
·
Oceanía, donde
impera el socialismo inglés y que comprende Reino Unido, Irlanda, América,
Australia, Nueva Zelanda y el Sur de África.
·
Eurasia, donde gobierna
el neobolchevismo. Comprende la Unión Soviética y Europa (excepto Reino Unido e
Irlanda).
·
Esteasia, donde
impera la “Adoración de la Muerte” o “Desaparición del Yo” . Comprende China, Mongolia,
Japón y países del sureste asiático.
El Gran Hermano es el líder supremo. Él es la encarnación
de los ideales del Partido todopoderoso que vigila de forma permanente a la
población a través de “telepantallas” sitas en calles, casas, bares... No
obstante, Orwell insinúa la posibilidad de que el propio Gran Hermano no sea
una persona real, sino un mero icono propagandístico con carácter paternal.
El Partido es la organización a la que han de
pertenecer todas las personas, a excepción de los proles, que constituyen la
inmensa mayoría de la población. Estos últimos están mantenidos en la miseria
más abyecta, pero se les entretiene de diversas formas por parte el Partido
para preservarlos contentos en su situación. Sólo saben obedecer órdenes y se
los considera incapaces de rebelarse; se les conceden los mismos derechos que a
los animales y, de hecho, la Policía del pensamiento apenas los vigila, pues:
“a los proles se les permite la libertad intelectual porque no tienen intelecto
alguno”.
Los lemas del Partido son los siguientes:
·
Paz es Guerra: La guerra produce el miedo en los ciudadanos
haciendo mucho más difícil que se rebelen por temor a la invasión del país
enemigo.
·
Libertad es Esclavitud: El esclavo se siente libre al no conocer otra cosa.
·
Ignorancia es Fuerza: La ignorancia de los proles también evita su
rebelión contra el partido.
Por supuesto, el Partido goza de un enemigo
traidor, antiguo camarada de los tiempos de la Revolución que llevó al INGSOC
al poder: Emmanuel Goldstein, una clara alusión a la figura de Trotsky. Este
enemigo interno es utilizado por el régimen para canalizar el odio de la
población hacia el grupo traidor conocido como “La Hermandad” cuyo fin es
destruir el régimen establecido.
En este artículo no realizaré una sinopsis del
libro, ya que dada su complejidad se antoja ardua tarea, así como el deseo de
invitar a leer esta fantástica novela que, hoy más que nunca, se hace necesario
leer.
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